domingo, 10 de mayo de 2009

MIEDOS

Enciendo la tele, la radio, todos hablan de lo mismo. Hay una epidemia en México que ya arrastró la vida de miles de personas en todo el mundo; hay un mosquito que vino de nosedonde que ya mató muchos argentinos; hay unos “locos” con camisetas de colores que destrozaron varios locales de calle Mitre (y tal vez hoy salgan a romper unos cuantos más)...
De la forma que sea, todos hablan de lo mismo: EL MIEDO.
Hay miles de personas en el mundo que pagan por un barbijo más del doble del valor que tenía hace un mes, y lo mismo pasó con el paracetamol y los repelentes.
Hay cientos de personas que piden a gritos que se baje la edad de imputabilidad para que los menores sean condenados; y ni menciono a las personas que hace poco más de un mes encabezaron una marcha clamando por la pena de muerte.

“Ya no tiene que haber canchas, los partidos deben ser a puertas cerradas”
“Si no gana el oficialismo, volveremos a estar como en el 2001”


¿Qué está pasando, gente?
¿No nos damos cuenta de que quieren que tengamos miedo?
Me da miedo lo que veo, no el dengue, no la influenza, no los chicos que limpian los vidrios en las avenidas... me da miedo la gente, me da miedo escuchar que hay que matar al asesino...

“el ojo por ojo deja ciego al mundo”

En esta civilización egoísta, qué me importan los cómo y los porqué, si robó es un “chorro de mierda”, si vive en la villa es un “negrito”...y todo está bien mientras a mí no me pase.
Sí todos pensáramos un poco más en el otro...
Yo no justifico al ladrón, al asesino, al violento...pero en mayor o menor medida todos estamos sumergidos en la misma ola de violencia y miedo.

Disculpen que hoy no hable de arquitectura, después de una semana de escuchar hablar del mismo tema, creo que tenemos que reflexionar al respecto... tal vez algunos piensen “y yo que tengo que ver, si hubiera querido pensar en eso hubiera estudiado ciencias políticas o humanidades” jaja, es verdad, a veces pensamos esas cosas, pero piensen que un pequeño cambio en nosotros podría mejorar las cosas, por ejemplo, respetar las normas de tránsito, ser cordiales al manejar, me ha pasado en Siberia ver que circulan por las calles del predio como si fueran avenidas, cuando en realidad en la calle adoquinada “manda peatón”, también he visto a varios vehículos ingresar por calle La Paz a más de 60 km/h (cuando ahí hay un barrio en el que muchas veces hay niños y animales en la calle); ni hablar de la mugre ¡¡los papeles van al tacho!! (Tanto dentro del CUR, como a la salida, y dentro de la FAPyD.... ¿tantos nos cuesta tirar la basura donde corresponde?, más allá de que haya gente que limpia la facu, no nos cuesta nada mantener limpias las aulas)
¿Que tiene que ver esto con el miedo? Todo. Porque, a mi parecer, si todos contribuimos a bajar el nivel de egoísmo y, por ende, el de violencia, todo estaría un poco mejor...

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